
Diabetes tipo 1 y tipo 2: síntomas y diagnóstico
Síntomas
Síntomas de la diabetes tipo 2
Inicio de la enfermedad
La diabetes tipo 2 permanece silenciosa durante varios años o incluso décadas. Es por eso que con frecuencia se descubre de manera fortuita, por ejemplo, durante un análisis de sangre banal o un examen de orina.
Aumento de azúcar en la sangre
Mientras el páncreas compense la resistencia a la acción de la insulina aumentando la cantidad de insulina secretada, el nivel de azúcar permanece estable en la sangre. Por otro lado, cuando la producción de insulina comienza a disminuir, los niveles de azúcar en sangre (glucemia) aumentan de forma crónica. Entonces pueden aparecer síntomas, especialmente en la diabetes tipo 1:
- Necesidad frecuente de orinar.
- Sed intensa.
- Hambre insaciable.
- Cansado
La diabetes también se puede descubrir cuando aparece una de sus complicaciones: infarto de miocardio (del corazón), claudicación intermitente (cojera y dolor que se produce después de unos pocos metros de caminar y relacionado con daños en las arterias de las piernas), ictus, trastornos visuales, impotencia, etc.

Diagnóstico
1. ¿Para quién es la prueba de detección de diabetes?
Como la diabetes puede desarrollarse de manera bastante silenciosa, la detección puede ser útil. Se recomienda para las personas con mayor riesgo de desarrollar diabetes:
- Personas mayores de 45 años.
- Aquellos que tienen sobrepeso u obesidad, especialmente si su sobrepeso es abdominal.
- Aquellos que tienen diabetes en su familia inmediata.
- Personas con alto riesgo cardiovascular, porque fuman, tienen demasiado colesterol o son hipertensas
- Aquellos con antecedentes de diabetes gestacional.
- Y por supuesto en personas que ya han sufrido un incidente cardíaco o cerebral (ictus).

2. ¿Cómo diagnosticar la diabetes?
Glucosa en ayunas
La diabetes se diagnostica mediante un análisis de sangre con medición de la glucemia (nivel de azúcar en la sangre). El diagnóstico se realiza mediante un nivel de azúcar en sangre en ayunas mayor o igual a 126 mg/dL, verificado dos veces.
La prueba de hiperglucemia inducida
Las personas con valores entre 110 y 126 mg/dL se consideran de riesgo y por lo tanto deben ser monitoreadas de cerca. Tienen «intolerancia a la glucosa», que es un estado prediabético y está asociado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.
En estas personas, podemos tomar varias muestras de sangre durante 2 horas, después de haberles hecho tragar una gran cantidad de azúcar. La evolución del azúcar en sangre a lo largo del tiempo, si supera un cierto umbral, hará el diagnóstico de diabetes.
Hemoglobina glicosilada
Medir el nivel en sangre de lo que se llama «hemoglobina glicosilada» da una idea del promedio de azúcar en sangre durante los últimos tres meses. Su dosificación permite monitorizar el balance glucémico y así evaluar y adecuar el tratamiento antidiabético.

